Tienes una empresa. Llevan más de 10 años en el mercado y tienen buenos clientes, ingresos estables, un equipo sólido, una hermosa oficina, un gran almacén, etc.
Pero la empresa ya no crece al ritmo que esperan.
Si pasa esto en tu empresa, es normal, no son los únicos en esta posición. Es normal querer brindar el mejor servicio a nuestros clientes, contratar al mejor equipo, invertir en maquinaria, etc. pero por esto, a largo plazo sin darnos cuenta nos quedamos en la zona de confort y posponemos algunas acciones de marketing que nos ayudan a seguir creciendo.
Dentro de algunas acciones claves, están el renovar el logo, renovar la web, estar activos en redes sociales, etc. Pero, ¿con qué arrancar?
La elección depende en gran medida de tus objetivos, tu visión, recursos y tipo de producto o servicio.
Aquí compartimos nuestra opinión al respecto:
1. Comenzar con la creación o renovación del logo:
Renovación de la imagen de marca
Un nuevo logo puede ayudar a darle un aspecto fresco y moderno a tu empresa. Esto puede atraer la atención de nuevos clientes y demostrar que tu negocio está al día y en constante evolución. También, ayuda a diferenciarte de la competencia y hacer ruido en tu sector por este cambio de identidad.
Mejora de la percepción de marca
Un logo obsoleto o poco atractivo puede dañar la percepción de tu marca. Un diseño renovado puede ayudar a mejorar la percepción de tu empresa y a generar confianza en tus clientes.
Si tu empresa ha evolucionado, ampliado su alcance o cambiado su enfoque, un nuevo logo puede reflejar mejor esos cambios y comunicarlos de manera efectiva a tus clientes.
Facilita la consistencia de marca
Un nuevo logo puede servir como punto de partida para una estrategia de marca más coherente. Puedes utilizar el nuevo diseño como base para actualizar otros materiales de marketing, como tus tarjetas de presentación, folletos, presentaciones, etc.
Así mismo, tu participación digital en lo que vendrá a ser la web y presencia en redes sociales como Facebook, Linkedin, Instagram y TikTok.
❌ El gran OJO: El branding no tiene retorno de inversión inmediato
Algunas personas creen que por invertir en branding, automáticamente van a llegar nuevos clientes. Falso.
Esta inversión es a largo plazo; un branding o rebranding te permite mejorar tu posicionamiento, sin embargo, recién verás retorno cuando salgas «a cazar» clientes.
El branding es como componer una canción de manera estratégica: buscas las mejores melodías y la mejor voz para un buen resultado. Pero no significa que automáticamente vas a tener oyentes – vas a tener que tocarla en eventos, publicarla en redes, ver un videoclip, etc.
2. Comenzar con tus redes sociales:
Tienes acceso inmediato a la audiencia
Las redes sociales te permiten llegar a tu audiencia de inmediato. Con pocos recursos, podrás llegar a nuevas personas en Facebook e Instagram, y con mucha creatividad, en plataformas como TikTok o Linkedin.
Interacción directa con prospectos o clientes
Puedes interactuar directamente con tus seguidores, responder preguntas y construir una comunidad sólida que se convertirán en clientes potenciales.
Costos iniciales bajos
Comenzar en redes sociales generalmente implica costos iniciales bajos en comparación con el desarrollo de un sitio web.
❌ El gran OJO: Aprendizaje de la plataforma
Estar en redes sociales no es solo publicar imágenes o videos. Hay un mundo ENORME detrás.
- Tu presencia en redes sociales estará sujeta a los cambios de algoritmos y políticas de cada plataforma, lo que puede afectar la visibilidad de tu marca.
- También está el tema del contenido orgánico o pagado. Si vas a trabajar con plataformas como Facebook, Instagram o Linkedin, fijo vas a tener que asignar un presupuesto adicional para llegar a más personas. Y también a especialistas que sepan manejar las herramientas de publicidad de cada plataforma.
- Necesitas a un equipo de trabajo que maneje diversas especialidades, como: diseño gráfico, creación de contenido, community management, etc. Es muy difícil encontrar a UNA sola persona que haga todo; si las hay, usualmente lo hacen mal, ya que, si bien son especialidades complementarias, cada una tiene propio mundo de complejidad.
Lo mejor, es siempre partir desde una estrategia de contenidos para ver la ruta de trabajo.
3. Comenzar con la página web:
Credibilidad para tu negocio
¿En quién confiarías más? ¿En la empresa A que tiene web, artículos en el blog, opiniones, número de contacto, etc., o en la empresa B sin web?
Control total
Tener tu propio sitio web te brinda control total sobre la apariencia, la funcionalidad y la experiencia del usuario. Puedes personalizarlo para reflejar la identidad de tu marca.
Mayor flexibilidad
Puedes expandir tu sitio web a medida que tu empresa crece, agregar una tienda en línea o integrar herramientas específicas según tus necesidades.
❌ El gran OJO: Costos inciales mayores y el tiempo de posicionamiento
Considera lo siguiente:
- La creación y el mantenimiento de un sitio web pueden ser costosos. Tendrás que invertir en el diseño, desarrollo y alojamiento de la página, así como en actualizaciones y mantenimiento continuo. Para esto, lo mejor es contratar a una agencia especializada en webs que cubren con todos esos detalles.
- Crear y mantener un sitio web puede requerir tiempo y recursos considerables, especialmente si no tienes experiencia en el mundo web. Además, actualizar y mantener el contenido puede ser una tarea constante. Es importante que mapees un presupuesto mensual fijo para este mantenimiento.
- Posicionar un sitio web lleva tiempo y esfuerzo. Necesitarás publicar artículos de calidad con optimización SEO para obtener resultados sólidos, por lo que mensualmente, deberás asignarte un tiempo para escribrir y publicar artículos, o en su defecto, contratar a un especialista para que lo haga.
- El tráfico a tu web no llegará solo. Si decides trabajar de forma orgánica, considera que deberás invertir en SEO y puede tomar tiempo.
En cambio, si decides conseguir tráfico más inmediato, podrás invertir en publicidad en redes sociales, difundir artículos en redes sociales, invertir en publicidad de Google Search (SEM), etc.
Por ejemplo, si tu empresa se dedica a brindar servicios de limpieza en departamentos o oficinas, sería una buena idea iniciar con un web, ya que es un servicio más específico que probablemente tenga más efectividad en motores de búsqueda que con los algoritmos de redes sociales a diferencia por ejemplo de un producto como venta de café o muebles.
En muchos casos, una estrategia equilibrada que combine todos los enfoques puede ser la mejor opción.
No dejes que la elección entre redes sociales y una página web te detenga. ¡En Hambre Digital estamos listos para ser tu guía en este emocionante viaje!
Juntos prepararemos una estrategia en línea que no solo impresionará, sino que también generará resultados tangibles para tu empresa y dejará a tu público con ganas de más.